Discurso de la presidenta nacional de Andime, María Beatriz Fuenzalida, en el marco de la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado.
Buenos Días, señor ministro, subsecretarias, subsecretario, autoridades dirigentes y trabajadores y trabajadores del Ministerio de Educación.
Hoy conmemoramos 50 años del golpe de estado en Chile y las palabras no son suficientes para describir el horror de centenares de víctimas de secuestros, torturas, desaparición forzada y ejecuciones de compatriotas, quedando sus familias en la indefensión ante el avance implacable de la dictadura en nuestro país.
Se escribe así, con sangre y muerte el quiebre de la democracia en Chile, dando paso al episodio más oscuro de la historia de nuestra patria. Hoy recordamos a los caídos, de los cuales muchos de ellos fueron dirigentes sindicales, a quienes les hacemos un homenaje abrazando su legado.
Lamentablemente, esta tragedia aún continúa después de 50 años con sobrevivientes que aun cargan con el dolor del exilio, la tortura y la prisión política, al igual que las mil familias que aun buscan a sus seres queridos que fueron hechos desaparecer. Enviamos nuestro sincero abrazo solidario para todos ellos.
Lo anterior, no puede quedar en el olvido, debemos aprender a ser una sociedad que valore la vida de las personas, aunque piensen distinto, desarrollar la capacidad de pensamiento crítico y deliberación, pues los pueblos y sus derechos fundamentales, deben avanzar sobre la base del diálogo, pensando en una sociedad más justa. Por ello creemos firmemente, que los problemas en democracia no se solucionan con golpes de estado ni dictaduras, se solucionan con más democracia. Buscando los equilibrios en las ideas, en el bien común.
Ante esta realidad , nuestra Asociación de Trabajadores y Trabajadoras del Ministerio de Educación -Andime- ratifica que nuestra prioridad es y será siempre, la defensa y el desarrollo de los derechos humanos y laborales fundamentales de quienes trabajan en este servicio, sabiendo que todas las luchas ganadas o perdidas tendrán impacto al interior de sus familias.
Andime valora el respeto a las personas, a la vida, a la dignidad Humana, por ello, seguiremos haciendo ejercicios de memoria, porque es nuestro deber también asegurar el “Nunca Más” y que este se haga carne.
Dado lo anterior, también es importante dimensionar como trabajadores y trabajadoras, el golpe que significó la dictadura para la educación chilena, transformándose de un bien común y social a un bien de consumo. No debemos olvidar que, el sistema educativo escolar sufrió un golpe a su financiamiento, a su prestigio, y a su estatus simbólico al interior de la sociedad. Escuelas y liceos públicos fueron un espacio de integración social durante buena parte del siglo XX. Sin embargo, la municipalización de este sector marcó el inicio de un proceso de desmantelamiento que debilitó la oferta pública en términos de calidad y excelencia.
Cabe señalar, que el gasto público en educación decayó abruptamente y, con ello, se inició una era de precarización de la educación pública municipal y de la situación de profesores y profesoras hasta el día de hoy, es por ello que es imprescindible para los trabajadores y trabajadoras de nuestra asociación seguir avanzando en la construcción de políticas públicas que devuelvan la excelencia y el carácter democratizador a la educación chilena, garantizando y asegurando el acceso de todos y todas sin discriminación. Es tiempo de mejorar el proceso de desmunicipalización de la educación chilena, que esté a la altura de las necesidades de las futuras generaciones de estudiantes de nuestro país. Los SLEP deben mejorar su gestión y el ministerio cumplir con su rol rector junto a la supervisión. Por lo tanto, invitamos a las autoridades a no claudicar en esta demanda es justicia.
Finalmente, solo decir que la unidad será vital para seguir bregando por los desafíos que se vienen, porque como asociación en nuestros principios está el discutir la política pública y leyes que afectan nuestro que hacer desde nuestros roles, funciones y compromisos asociados relacionado directamente con el rol rector del Mineduc, en donde cada funcionario y funcionaria independiente al estamento que representa tiene un aporte significativo que hacer para el desarrollo y crecimiento de cada ciudadano de nuestro país y la nación en su conjunto relevando por sobre todo, la formación de las futuras generaciones en el respeto y valoración de los derechos humanos.
Sigamos avanzando con los sueños y esperanzas de un Chile mejor con humanidad social, comunitaria y el compromiso con el servicio público, caminando hacia un nuevo trato con los trabajadores/as a lo largo de todo Chile, haciendo un llamado fuerte y claro a la unidad política y social que se necesita para avanzar hacia un país que queremos; Por lo tanto, seguiremos siendo realistas pidiendo lo imposible. pero con ustedes, porque creemos firmemente que Juntos somos más fuertes.
A 50 años del Golpe Militar, Un país sin memoria no tiene futuro
¡Nunca más!
¡muchas gracias!