Declaración Pública de Asociación Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Ministerio de Educación.
Como Asociación Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Ministerio de Educación (Andime) desde el inicio de la pandemia hemos puesto la salud y la vida de los y las colegas y sus familias en el centro de nuestra gestión. En ese marco durante más de un año hemos podido conseguir un alto porcentaje de trabajadores/as ejerciendo sus labores de manera remota. Es por ello, además, que hemos insistido en que el retorno a clases presenciales es imposible mientras no se aseguren las condiciones sanitarias en todos los establecimientos públicos y mientras no haya un plan de transporte que proteja la vida de los alumnos/as, profesores/as y sus familias.
Rechazamos la persistente orden ministerial de volver a las clases presenciales, ya que tal como lo hemos dicho las organizaciones de trabajadores/as y también los especialistas, cada vez que se experimenta con el retorno, aumentan los casos positivos de covid19 y tenemos que lamentar contagios de estudiantes y de trabajadores/as de la educación y su círculo más cercano; la familia.
Nos parece inaceptable que la última llamada a retornar a clases presenciales durante el mes de junio haya sido de la mano del informe “Diagnóstico Integral de Aprendizaje”, desarrollado por la Agencia de Calidad de la Educación, donde se detalló respecto a un “terremoto educacional”, producto de paupérrimos resultados, como por ejemplo que, entre sexto básico a cuarto medio los estudiantes no alcanzaron el 60% de los contenidos necesarios en lenguaje y no superaron el 47% en matemática. En esa línea, en segundo medio los estudiantes aprendieron solo un 27% de su materia.
A través de un comunicado, la Directiva de la Asociación de Funcionarias y Funcionarios Nivel Central, Servicio Local de Educación Pública Barrancas, indicó que dicho informe carece de elementos técnicos para concluir que estamos en medio de un “terremoto educativo” e informó que “fue un instrumento de carácter voluntario que se aplicó en distintos establecimientos educacionales del país, que buscaba, de acuerdo con lo informado por las autoridades, levantar información parcial para que los equipos pudieran tomar decisiones en su planificación 2021. Ante esta desinteresada ayuda de la Agencia de la Calidad, muchos establecimientos aceptaron aplicar el instrumento, considerando que, si bien no sería concluyente, era un insumo interesante para el desarrollo de la etapa inicial del año”.
Además, no hay certeza de que ese informe se haya hecho con respuestas de los estudiantes y en su mayoría no se pudo desarrollar debido a la ya conocida brecha digital, por lo tanto, no se reúnen las condiciones mínimas de validez de la muestra, por lo mismo siempre se consideró como una mirada general y no determinante.
Como Asociación de Trabajadores y Trabajadoras del Ministerio de Educación, insistimos en que las medidas sanitarias son las que deben primar, es decir, si la comuna está en cuarentena o en fase de transición no hay que exponer a alumnos ni a trabajadores, ya que habría una alta probabilidad de contagios, a pesar de que los establecimientos cuenten con las medidas de seguridad, puesto que el sistema de transporte presenta el mayor riesgo.
Creemos que es fundamental que los contagios disminuyan para poder recién ahí asegurar un retorno seguro. De todas maneras respetamos la decisión de cada familia respecto a sus niños, niñas y adolescentes, pero es fundamental que lo hagan informados.
Llamamos a las autoridades a escuchar a los especialistas, a las organizaciones y a todos quienes somos actores incumbentes en esta materia. Recordemos que el Colegio Médico al retirarse de la Mesa Covid, denunció que “las decisiones imprudentes, tomadas en espacios sin actas, ni expertos, han devenido en un nuevo descontrol de la transmisión viral, impactando en vidas y secuelas de miles de personas”.
Como sindicato seguimos bregando por el cuidado de la vida y la salud de los trabajadores, trabajadoras y sus familias.