Por la defensa al derecho al trabajo y el respeto a la dignidad de los trabajadores y trabajadoras del Ministerio de Educación, el Directorio Nacional no puede quedarse callado ante el flagrante y reiterado atropello a nuestros compañeros y compañeras.
Acciones desatadas por jefaturas y “coordinadores/as”, que, a través del amedrentamiento, maltrato, abuso y persecución laboral, pretenden ocultar su inoperancia y desconocimiento de la realidad del país y del servicio público, la implicancia de sus actos irresponsables con el sistema educacional chileno, no solo atentando contra la estabilidad emocional y laboral de los trabajadores y trabajadoras, sino que, de la institucionalidad ministerial, como lo hemos manifestado majaderamente en los comunicados y a la prensa.
El gremio ha puesto en conocimiento y exigido tomar cartas en el asunto a la jefatura del servicio y responsable de la dotación, Sr. Raúl Figueroa, Subsecretario de Educación por lo anterior :
- Reiteramos, que no podemos dejar pasar la cantidad de sumarios con destitución que están surgiendo, abusando de la normativa del propio Estatuto Administrativo; en que algunos afectados/as desconocen las razones de estos y otros sabiendo claramente que es persecución a secas.
- Exigimos la salida de jefaturas y coordinaciones que usan como amedrentamiento los sumarios y otras malas prácticas laborales como anotaciones de mérito para algunos y de demérito para otros, tratando de generar enfrentamiento entre los trabajadores y trabajadoras.
- El derecho al trabajo implica condiciones para su desarrollo y estas no están siendo cumplidas por las autoridades, tales como: infraestructura, espacios decentes, recursos para las salidas a terreno programadas, apoyo a todos los establecimientos insuficientes, reuniones y talleres programados con diferentes estamentos de las comunidades escolares, entre tantas otras acciones que van en directo beneficio para una educación de excelencia. Y lo más importante, la falta de reemplazo de aquellos trabajadores/as que se acogen a retiro voluntario, provocando agobio laboral en los que se quedan, contratando más y más asesores para jefaturas y no para las funciones que falta por atender.
- Terminar con la transgresión de un derecho humano, como son las licencias médicas de los trabajadores y trabajadoras, ocasionando despidos y persecución por esta causa. Las jefaturas no se pueden arrogar la autoridad de decir cuál es válida y cual no, es otro servicio del Estado quien decide. De lo que debe ocuparse la autoridad es de su reemplazo, por algo el servicio ministerial recupera los costos de cada licencia médica; pero se sigue “ahorrando la plata “ en desmedro de los que se hacen cargo de más y más funciones.
Recordamos a nuestros socios y socias, que la defensa de los despedidos en diciembre del año 2018 no ha terminado. ANDIME continúa avanzando en su defensa, no se ha terminado la lucha, ponemos a vuestro conocimiento solo algunos de las últimas situaciones:
- Hace aproximadamente tres semanas atrás, fue reintegrada al servicio con todos sus derechos, una compañera despedida por licencia médica. El servicio debe cancelar su sueldo desde enero a la fecha.
- La asesoría jurídica de ANDIME, ha avanzando en levantar jurisprudencia en salas del Poder Judicial, logrando que cerca de cuarenta compañeros y compañeras fueran indemnizados por el Estado, por despidos arbitrarios, con un alto costo para el Estado, uno de los pagos alcanza a los veintitrés millones de pesos. El viernes pasado el Consejo de Defensa del Estado declaro el pago de uno de los casos emblemáticos de ANDIME: la primera despedida 2018, trabajadora a honorario, (de “confianza”, declarada en su contrato), que estaba ejerciendo funciones permanentes por cerca de tres años, a quién se le cancelan cuatro millones de pesos de “indemnización” aprox.
Con los trabajadores y trabajadoras del Estado no se juega, ha costado que las autoridades de turno comprendan que una cosa es el gobierno, que trae sus “asesores” y apoyos, otra bien distinta son las funciones permanentes del Ministerio de Educación, que, de acuerdo con la legislación vigente, a los compromisos y desafíos que en materia educacional ha adquirido el Estado en tratados internacionales y a nivel nacional con la sociedad chilena, requieren de continuidad.
Como trabajadores y trabajadoras del Ministerio de Educación, no podemos dejarnos avasallar ni amedrentar, no estamos solos en esta lucha, que no es solo nuestra, es de todos y todas los que crean:
- Que la Educación es un Derecho Humano irrenunciable;
- Que los trabajadores del Estado debemos nuestro esfuerzo a la sociedad chilena en su conjunto, ¡AQUÍ NO SOBRA NADIE!.
- Que los niños, niñas, jóvenes y adultos son el motor que mueve nuestro accionar, por lo tanto, exigimos seriedad en las propuestas del ministerio para el desarrollo de sus aprendizajes.
En tal sentido, llamamos a cada uno de los socios y socias de ANDIME, a ser parte de la defensa al trabajo de nuestros compañeros y compañeras; a no dejar pasar ningún acto de maltrato o amedrentamiento al interior del servicio y exigir a la autoridad protección de lo que venga del exterior.
¡SOLO LA UNIDAD DE LOS TRABAJADORES Y TRABAJADORAS NOS HARA INVENCIBLES!
¡ANDIME, JUNTO A LOS TRABAJADORES Y TRABAJADORAS DEL MINISTERIO DE EDUCACIÓN, GOBIERNE QUIEN GOBIERNE!